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🏆 Crónica histórica: 18 de noviembre de 1951 — Sport Boys 3, Municipal 2

  • José Luis
  • 18 nov
  • 3 Min. de lectura

El 18 de noviembre de 1951 quedó marcado con letras doradas —o mejor dicho, rosadas— en la historia del fútbol peruano. Ese día, el Sport Boys Association se consagró como el primer campeón profesional del Perú, tras vencer 3–2 al Deportivo Municipal en el antiguo Estadio Nacional de Lima, en un partido que para muchos fue una “final” aunque se jugara como parte de la liga.

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Contexto histórico: el salto al profesionalismo

El torneo de 1951 marcó el inicio del fútbol profesional en el Perú. Fue organizado por la Asociación Central de Fútbol (ACF), reemplazando definitivamente la antigua estructura amateur. Participaron 10 equipos de Lima y Callao, en un campeonato que desde el inicio tuvo un ritmo intenso y un ambiente muy diferente al de los torneos anteriores.

Al cierre de la temporada, Sport Boys y Deportivo Municipal llegaron igualados en puntos a la última fecha, ambos con 26 unidades. La definición quedó servida: rosados y ediles chocaban en el viejo Estadio Nacional para decidir al primer campeón profesional del país.

La campaña del Boys fue sólida de principio a fin. Terminó con 13 triunfos, 2 empates y solo 3 derrotas, acumulando 28 puntos que finalmente le dieron el título. El hombre clave de aquella campaña fue Valeriano López, quien anotó 31 goles y se convirtió en el máximo artillero del torneo, dejando una marca que hasta hoy es recordada con admiración.


El partido decisivo: una final con dramatismo chalaco

El 18 de noviembre de 1951, las tribunas del antiguo Estadio Nacional —el que en sus primeros años se llamó Estadio Guadalupe— vivieron una atmósfera inolvidable. Desde temprano se formaron largas colas, y la marea rosada, mezclada con la franja edil, se adueñó de las gradas.

Municipal llegaba con un plantel fuerte, dirigido por Juan “Mago” Valdivieso y con jugadores de peso como Manuel Rivera. Boys, por su parte, presentaba un juego más vertical y punzante por las bandas, con los hermanos Valdivieso y Boluarte como flechas ofensivas.

Desde el pitazo inicial, los rosados presionaron con todo. A los seis minutos ya habían generado la primera jugada clara de gol y, antes del cuarto de hora, acumulaban varios tiros de esquina que hacían temblar a la defensa edil.

El primer tanto llegó a los 35 minutos: Pedro Valdivieso desbordó por la izquierda, sacó un centro preciso y Valeriano López, con un cabezazo imperial, abrió el marcador. La hinchada explotó. Municipal buscó reaccionar, pero Boys mantuvo su ritmo y se fue al descanso ganando 2–1.

La segunda mitad fue un torbellino de emociones. Boys consiguió el 3–1, pero Municipal descontó y puso el marcador 3–2, encendiendo los nervios en el estadio. Hubo momentos tensos, incluso una gresca entre jugadores que detuvo el partido por algunos minutos. El dramatismo era total.

Cuando el árbitro pitó el final, el marcador se mantuvo: Sport Boys 3 – Municipal 2. La fiesta chalaca invadió la cancha, las tribunas y las calles del Callao. Nacía el primer campeón profesional del fútbol peruano.


Protagonistas del título

Valeriano López

Figura estelar del campeonato y goleador absoluto con 31 tantos. Su capacidad aérea, potencia y frialdad en el área lo convirtieron en un delantero temible e inolvidable.

Guillermo “Willy” Barbadillo

Compañero de ataque y gran socio de Valeriano, fue pieza clave del tridente ofensivo rosado.

Manuel Drago, Pedro Valdivieso y Guillermo Valdivieso

Jugadores fundamentales por su velocidad, lectura del juego y capacidad para generar constante peligro por las bandas.

Alfonso Huapaya (DT)

Director técnico y, curiosamente, también sastre de profesión. Su liderazgo sereno y táctico marcó la ruta hacia la gloria.


Significado y legado

El campeonato de 1951 representó el ingreso definitivo del fútbol peruano a la era profesional. Para Sport Boys, no fue solo una estrella: fue un símbolo de identidad, orgullo y grandeza. El Callao celebró como un solo cuerpo aquella gesta, que se convirtió en parte esencial de su memoria colectiva.


La campaña consolidó a Valeriano López como uno de los grandes goleadores de la historia y elevó al Boys al sitial de “primer campeón profesional”, un título que nadie puede igualar ni borrar.

Ese 18 de noviembre quedó grabado para siempre como el día en que el puerto escribió una de las páginas más hermosas del fútbol peruano.



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